Materiales psicoeducativos

El desarrollo profesional significa mantener los conocimientos y las habilidades esenciales necesarios para realizar las tareas en el trabajo actual, así como desarrollar competencias adicionales para la promoción o transferencia a otro puesto. El desarrollo continuo del conocimiento, las mejoras en la tecnología y la producción y la expansión de los roles laborales, obligan a prácticamente todos/as los/as empleados/as a aprender y adaptarse constantemente. A menudo es necesario mejorar las competencias existentes y adquirir otras nuevas, para garantizar que sigamos siendo una parte competente de la fuerza laboral, solicitar un ascenso o buscar diferentes puestos de trabajo. La falta de desarrollo puede ser una fuente de estrés, puede reducir la autoestima y causar una falta de satisfacción laboral. Además, las habilidades técnicas (por ejemplo, saber cómo reparar un ordenador, preparar documentos u operar máquinas complicadas) y las habilidades interpersonales son cada vez más importantes. Las habilidades interpersonales se centran en la forma en que uno/a se relaciona e interactúa con otras personas. Algunos ejemplos de habilidades sociales son la resolución de conflictos, la gestión del tiempo y el trato con clientes/as desafiantes. Poseer tales habilidades ayuda a hacer frente a situaciones difíciles y estresantes y también puede ser un activo positivo al solicitar un ascenso o un nuevo trabajo. Cuando el desarrollo profesional está bloqueado por factores externos (por ejemplo, la falta de oportunidades de ascenso) o factores internos (por ejemplo, la falta de motivación para cambiar), experimentamos frustración y el trabajo deja de darnos satisfacción. Podemos sentir una falta de energía, una falta de sentido de los logros diarios y una baja autoestima. Por eso es importante tratar el desarrollo profesional como un proceso a largo plazo que requiere una acción reflexiva y planificada. Es bueno pensar en los objetivos profesionales, cómo alcanzarlos y qué bloquea este desarrollo. Solo entonces nuestras acciones pueden ser efectivas. Si sientes que tu carrera está estancada, intenta hablar con tu superior. También puedes comprobar si hay nuevas oportunidades laborales o de desarrollo personal en tu departamento o en otros departamentos de tu lugar de trabajo. Nunca es tarde para aprender, y si la organización no ofrece perspectivas de desarrollo, vale la pena pensar en u futuro y en lo que quieres lograr, incluso buscar una carrera laboral en otro lugar podría ser una opción.